Para lograr el retorno de la sangre desoxigenada hacia las cavidades derechas del corazón el organismo cuenta con las venas, una serie de estructuras tubulares, distensibles y valvuladas que favorecen que el flujo sanguíneo se dirija en una sola dirección, en este caso ascendente, contribuido por una serie de mecanismos de bombeo.
Mecanismos de retorno venoso

Cuando un individuo se encuentra de pie la gravedad sobre la columna de sangre se opone al retorno venoso, no es suficiente la presión residual que pasa de la arteria a la vena mediante los capilares (Vis a Tergo) ni la diferencias de presiones en el abdomen durante la inspiración por el paso de la sangre desde la vena cava inferior al corazón (Visa Fronte ). Es en este momento que entra a funcionar una serie de músculos que son parte de las denominadas bombas impulso aspirativas o bombas musculares de los miembros inferiores.
Son estas bombas impulso-aspirativas de los miembros inferiores, conformadas por estructuras óseas, musculares y ligamentos cercanas a un trayecto venoso, las responsables de generar durante la deambulación los impulsos sanguíneos centrípetos y eficientes que garantizan el retorno venoso con la ayuda de un pequeño gradiente de presión.
El retorno venoso está muy favorecido por la dinámica del pie, tobillo y pantorrilla que produce al caminar una contracción de los músculos de los miembros inferiores, produciendo compresión de las venas e impulsando el retorno de la sangre a través del sistema venoso profundo, mientras que el permanecer horas sentado sin movilización de los miembros inferiores dificulta el retorno venoso llegando a producir estasis, lo cual favorece a la aparición de edema y es uno de los componentes de la tríada de Virchow que predispone a la trombosis.
El mecanismo de bombeo muscular mediante la contracción de los sinusoides venosos de los músculos genera una serie de cambios de presiones, que producen el desplazamiento de la sangre desde el sistema superficial al sistema venoso profundo a través de los cayados, venas perforantes y/o comunicantes de los miembros inferiores.
Bombas musculares utilizadas por el organismo humano
Entre ellas se encuentran las siguientes:
1.- Bomba cardiaca
Durante la sístole del ventrículo izquierdo la sangre es impulsada hacia el sistema arterial a presión elevada, llegando a baja presión al llegar al sistema venoso. En la diástole de las cavidades derechas se produce una presión aspirativa que actúa sobre el lecho venoso distal.
2.- Bomba tóraco-abdominal
Al estar de pie durante la inspiración hay un aumento de la presión intraabdominal produciendo disminución de los gradientes de presión entre las venas periféricas de los miembros inferiores y el abdomen, reduciendo el flujo en los vasos periféricos. En la espiración el gradiente de presión desde los miembros inferiores hacia el abdomen se eleva facilitando la aspiración del flujo venoso hacia el corazón. Mediante este mecanismo la bomba tóracoabdominal produce un gradiente de presión que modula el flujo venoso durante los movimientos respiratorios. Al realizar las maniobras de valsalva estos cambios respiratorios del flujo venoso pueden ser exagerados, lo cual hace aumentar las presiones intratoracica y abdominal, produciéndose la disminución, anulación o inversión del flujo venoso en alguna venas periféricas.
3.- Bombas venosas de las extremidades
Al iniciar la deambulación o el ejercicio se activan una serie de bombas musculares localizadas en los miembros inferiores constituidas por las masas musculares, las venas y sus válvulas. La contracción de estos músculos es llamada sístole, similar a la sístole cardíaca. Son estas bombas las ubicadas en la región distal del pie denominada esponja plantar o plexo venoso de Lejars, las que se encuentran en el tobillo así como la región peronea, y en su mayoría las ubicadas en la pantorrilla, región poplítea y muslo.
Todas estas bombas musculares son las responsables de que se produzca el vaciamiento rápido del sistema venoso y el drenaje de sangre en los tejidos. Es en la relajación (Diástole muscular) de los músculos donde se produce el cierre del sistema valvular generando un efecto aspirativo e impidiendo el flujo retrogrado.
Caso de paciente en un estadio C6 de la clasificación CEAP (úlcera activa) con falla de bomba muscular de la pantorrilla, observe en la primera foto el movimiento de extensión y en la segunda foto el de flexión, ambos generando limitación en el rango de movilización del tobillo:


Referencias Bibliográficas:
- William Zwiebel. Hemodinámica Venosa. Madrid Marban Libros. 2002. Pp12-14.
- Robert Rutherford. Hemodinámia venosa. Vascular Surgery .Elsevier 2005.
- Patología venosa .B.I.A.S. Bombas impulso – aspirativas de los miembros inferiores. Lic. Klga.Ftra GiselaWarszawski. Escuela de Flebologia y Linfologia para Kinesiólogos. Arg.

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